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lunes, 21 de septiembre de 2009

Campeones de Europa.

Cuando abrí la puerta, me enfrenté de repente a dos señores de mediana edad, bien vestidos, con porte de ejecutivos de segunda.
- Buenas tardes, estamos aquí para revelarle la palabra de Dios.
Giré mi muñeca, las nueve y cinco. Mi único Dios ahora mismo se llama Pau y quedan diez minutos para mostrarle al mundo su verdad suprema pensé, pero lo único que pude escupir fue un buenas tardes casi inaudible y un ustedes me contarán, como si lo mas importante en este día, fuera darle la bienvenida a la palabra expuesta por estos guias espirituales.
- Como usted sabe, el fin del mundo se acerca y tenemos cuentas pendientes con el creador,-comenzó su discurso el mas joven, como recién salido de un curso acelerado de venta a domicilio- me ofreció un pequeño folleto con ilustraciones algo infantiles para mi gusto, sobre los pasos a seguir para salvar mi alma. Tras la puerta de enfrente, el perro de mi vecino ladraba a unas voces desconocidas y desde el salón, la voz del televisor vestejaba los triples de Rudy, mientras yo intentaba deshacerme de mi visita inesperada con el tacto que el tema merecía: lo siento, creo que entre Diós y yo hay viejas cuentas pendientes y así creo que seguirán por mucho tiempo, no creo que ningún cataclismo acabe con nosotros por ahora.
Me despedí de los testigos de jehová y ellos a su vez me desearon buena suerte con una corrección y una educación absoluta.
Al volver al salón ya ganábamos de veinte. Que fácil lo hacen. Una máquina perfecta. Los típicos comentarios, pero sí, son la caña. ¿Por qué en este deporte sigues estando nervioso ganando de treinta y faltando cinco minutos? Ni idea. Ahí esta Pau machacando delante de un serbio de apellido innombrable mientras las banderas con una super ñ surgen de la grada, sin gritar demasiado, como pidiendo perdón por tanta superioridad.
Se acabó. Campeones de Europa. Confetis, banderas, saltos, cánticos. Entrega de trofeos. Pau en el quinteto ideal, mejor jugador del torneo y su medalla de oro al cuello.
Un tipo grande, campeón del mundo, subcampeón olimpico, campeón de la N.B.A. y ahora llora como quién alcanza la gloria. Debería tomar nota un tal CR que aún no ganó ni el pan de una trampa y tiene andares de dios griego, siendo un ignorante en Alejandría.
Me voy a la cama, abro mi libro de Bolaño y recuerdo mi visita.
El perro de mi vecino sigue ladrando a los ruidos del portal y mi Dios salda viejas cuentas con quienes creemos en el mundo de los vivos. Me gustaría rezar un Padre Nuestro, Bolaño me sumerge en Ciudad Juárez y olvido la liturgia por completo. Él sabrá perdonármelo, creo en Él sobre todas las cosas- sobre todo cuando ganamos de treinta sin despeinarnos-.

9 comentarios:

cocinandoconlulita dijo...

Sí, suele pasar que nos acordamos de Dios a diario y a veces para cosa tan sorprendentes como que nuestro equipo gane un partido,menudo trabajo tiene el pobre en plena liga.

saludines y sigue tan educado.

Anónimo dijo...

Él lo perdona todo... siempre y cuando se cumplan los requisitos:

Arrepentimiento.
Penitencia.
Propósito de enmienda.

Vamos, eso me parece recordar de aquella lejana catequesis.

Porque del perdón de Jehová, no recuerdo muy bien lo que me contaron sus testigos aquel domingo de hace nosecuantos años a las 10:30 de la mañana, mas o menos, cuando volvía a casa de fiesta. Anda, ahora que caigo, luego me quejo de los jóvenes de ahora... en fin, que me estoy liando.

Un abrazo.





John W.

Capitán Clostridium dijo...

¡QUé grandes! (nunca mejor dicho)

Yo no hubiera recibido a nadie... tuviste una gran paciencia.

Bella Muy Bestia dijo...

siento no haberte comentado mas pero he estado muy liada, pero dios cada dia escribes mejor si cabe, haces d la vida cotidiana una obra d arte. eres fantastico.

un saludo

ALEX B. dijo...

¿Viste a Pau, mirar al cielo y santiguarse al acabar?
No se´si tienes algo con Dios pero con Job tienes un rato...
En cualquier caso 0e 0e 0e!!
( yo tambien me preguntaba porqué estaba tan nerviosa ganando de tantos)
besos

Morgana dijo...

Muy bueno el post!!!

Olé por España!

La Furia de la Negra dijo...

A mi me vienen a visitar o bastante seguido me dan por la calle unas biblias de bolsillo. Debo tener una cara de que no me salvo del infierno, y bue.. Dante alli nos vemos.
Muy buen post.
Saludos.

dreamerchinn dijo...

Con un amigo siempre planeamos que cuando nos agarren por la calle, vamos a decir que somos adoradores de satán! jajaj
A cuidar las fronteras Antonio!
Saludos y gracias por pasar!

Andrés E. Medina dijo...

jaja, excelente, relata con viveza el momento justo en que no queremos ser molestados y menos por un dios ajeno que no tiene la más mínima oportunidad de ser escuchado dado que el nuestro se ocupa nuestro equipo.